Muchos estudiantes y egresados de la UNAM no pierden oportunidad de expresar el orgullo que sienten por pertenecer a la máxima casa de estudios, pero ¿te has preguntado de dónde nace este sentimiento?
Históricamente, la UNAM ya tiene más de 100 años y en la actualidad es cuna en la formación de profesionistas, investigadores y científicos que aportan grandes conocimientos al desarrollo cultural, social y tecnológico, no solo de México, sino para el mundo entero.
El orgullo nace desde que sabemos que la UNAM no solo les pertenece a los universitarios, sino realmente es de todos los mexicanos. Tanto los salones, institutos, servicios y más, todo está abierto para el público, además de ser una Universidad que promueve el diálogo, las ideas, el compromiso social, principalmente con el país, los ideales y convicciones.
Son virtudes y valores que se han mantenido fieles a su historia y que conforme pasa el tiempo, se le agregan más elementos que edifican a la máxima casa de estudios: los murales de Diego Rivera y Siqueiros, el Estadio Olímpico, la amplia oferta académica, los científicos que han egresado, el enorme acervo cultural que encuentras en sus bibliotecas, los tres premios Nobel que le han dado al país y que, incluso, la UNAM ya es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Es un hecho que historia dentro de Ciudad Universitario y en sus facultades ha ocurrido año con año. Las buenas acciones, el respeto y la búsqueda para aportar y tener una mejor sociedad es lo que destaca a la UNAM de otras universidades, y por ello la gran cantidad de estudiantes se sienten comprometidos para dar lo mejor de sí.
Cada día crece el orgullo universitario para decir Por mi raza hablará el espíritu y gritar un Goya.