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La semana pasada, presentamos algunos de los consejos que todo recién
graduado debe tomar en cuenta antes de aventurarse al mundo de las ofertas
laborales, pero eso es solo una parte de los retos que deberás enfrentar antes
de conseguir tu primer empleo.
Enviar tu CV a las organizaciones es solo uno de los muchos pasos antes de
que seas seleccionado para un trabajo y a menudo, puede pasar un buen tiempo
antes de recibir una llamada por una de tus postulaciones, pero cuando suceda,
debes estar preparado. Por eso, dejamos aquí algunos consejos para sobrevivir
al proceso de selección:
1.- La llamada telefónica
La mayoría de las empresas aplica un pequeño filtro telefónico antes de
citar a los candidatos a entrevista. En esta se sondea aspectos básicos sobre
la vacante, pero puede ser el fin de tu proceso si no estás preparado.
- Mantén un registro de tus postulaciones: Cuando recibas la llamada de una
empresa, consulta rápidamente tu registro para que tengas claro el puesto,
ubicación y sueldo de la vacante.
- Utiliza un tono adecuado de voz: Sonar inseguro o nervioso puede causar la
impresión de no contar con la experiencia necesaria para el puesto. Tal vez no
hayas tenido empleos anteriores, pero cuentas con los conocimientos, si es
necesario, menciona esto, haciendo énfasis en tus habilidades técnicas y tu
capacidad de aprendizaje.
- Realiza preguntas sobre la vacante: La mayoría de los reclutadores mencionan
los aspectos básicos de un puesto (sueldo, horario, actividades, prestaciones),
pero en caso de no hacerlo, pregunta por estos de manera cortés.
- Pregunta por el proceso de selección: Conocer las distintas fases que usa la
empresa en sus procesos te permitirá saber dónde te encuentras parado, de modo
que sabrás cuando has pasado, o no, cada uno de sus filtros.
- Muestra disposición: Deja en claro tu interés en el puesto,
muestra disposición para llevar a cabo el proceso de selección. Algunas
empresas solicitan algún paso antes de concretar una entrevista, muestra tu
disposición para realizarlo cuanto antes.
2.- La primera entrevista
Sí en el filtro telefónico el reclutador ha detectado que tu perfil se
ajusta a la vacante, te proporcionará una cita para realizar una primera
entrevista. Como recién egresado, puede que esto genere cierto grado de
nerviosismo, pero si te preparas, no tendrás nada que temer.
- Cuida tu presentación: No es necesario que uses un traje
costoso, pero si que muestres una imagen profesional y pulcra. Tu vestimenta
debe ser acorde al puesto que solicitas y mantener cierto grado de formalidad,
recuerda que es la primera impresión para dicha empresa.
- Lleva tu CV impreso: No importa que ya lo hayas enviado por
correo, o incluso lo hayas llevado de manera física a la empresa. El CV es
imprescindible en toda entrevista.
- Documentos adicionales: Dependiendo las políticas de la empresa,
se pueden llegar a solicitar documentos adicionales (comprobante de estudios,
cartas de recomendación, etc.) lleva contigo los documentos originales y
copias; en caso de que debas dejarlos.
- Conoce la empresa: Antes de presentarte a entrevista,
investiga un poco sobre la organización, sobre su historia, valores, servicios,
sucursales y incluso busca opiniones de trabajadores sobre su clima
organizacional. Esto te permitirá llegar preparado a tu entrevista y saber si
deseas o no, formar parte de la empresa.
- Prepara tus respuestas: Es verdad que no hay forma de saber que
preguntará el reclutador, pero puedes ensayar la manera en que presentarás tu
experiencia, lo que puedes aportar a la empresa y en general, la forma en que
deseas ser percibido.
- Se puntual: Lo ideal es llegar con 10 minutos de
anticipación, de modo que tu espera no sea excesiva y puedas mostrar una imagen
profesional.
- Cuida tu lenguaje corporal: Busca que tu postura refleje seguridad y
tranquilidad, manteniendo un adecuado contacto visual. Evita juguetear con las
manos, hundirte en el asiento, posiciones demasiado relajadas o impositivas,
mascar chicle o cruzarte de brazos.
- Muéstrate seguro y se amable: Evita tener una actitud arrogante,
muéstrate amable y dispuesto a escuchar y responder cada una de las preguntas
del reclutador. Aunque también debes tener cuidado de caer en el extremo
contrario, mostrándote inseguro y desesperado por obtener el empleo.
3.- Pruebas técnicas
Para algunas vacantes, es necesario demostrar los conocimientos que se
tienen en un área especifica, por lo que suelen realizarse exámenes o pruebas
de aptitud.
- No entres en pánico: Recuerda que si bien tu experiencia puede
no ser muy extensa, cuentas con los conocimientos que adquiriste en la escuela.
Relájate y responde lo que sabes.
- Mide
tus tiempos: La mayoría de pruebas técnicas cuentan con un tiempo
limitado, por lo que deberás tomarlo en cuenta, si no sabes una respuesta,
salta a la siguiente pregunta y contéstala si te ha sobrado tiempo.
- Respira y no dejes de estudiar: Puede que al realizar una prueba técnica,
detectes que has olvidado algunas cosas, o existen muchas que desconoces. Un
error común de los graduados es pensar que todo el conocimiento necesario para
su profesión fue obtenido en la escuela, y aun cuando esto pudiera ser cierto,
con el paso del tiempo, aquello que no se practica, se olvida. Mantente activo,
repasa tus lecciones, toma cursos, ve videos alusivos a tu carrera, lee o
practica lo que aprendiste.
4.- Psicométricos
Otro paso común en los procesos de selección son las pruebas psicométricas,
ya sea en un formato físico o digital, estas permitirán al reclutador conocer
aspectos de tu personalidad, tus motivaciones y tu reacción ante algunas
situaciones de la vida cotidiana. Al realizarlos, toma en cuenta los siguientes
aspectos:
- Se honesto: Es posible que quieras crear en el reclutador una
imagen especifica, pero recuerda, los perfiles están diseñados para personas
con ciertas características por una razón. Si mientes en tu psicometría y
obtienes el puesto, es posible que termines sintiéndote insatisfecho o
sobrepasado.
- No lo pienses demasiado: El punto es conocerte, sigue tus instintos
y contesta sin profundizar demasiado en la respuesta (a menos que sea un
problema matemático).
- Mide tus tiempos: Al igual que las pruebas técnicas,
contarás con un límite de tiempo, incluso si las pruebas son en línea.
Es posible que después de estos filtros vengan otros más (segunda y tercera
entrevista, estudio socioeconómico, etc.) dependiendo de las políticas de cada
empresa. También debes recordar que pasar por estos filtros no significa que
obtendrás el puesto, pero es un claro indicio de que tu perfil se acerca a lo
que la empresa busca.
No pierdas la calma, en promedio, los recién egresados tardan de seis meses
a un año en obtener su primer empleo, así que utiliza ese tiempo para seguirte
preparando. Asiste a cuantas entrevistas te sea posible, de modo que te
familiarices con dicho ambiente y te sea más sencillo hacerle frente, también
puedes buscar alternativas para generar ingresos mientras sigues en búsqueda
activa.
Así mismo, puedes recurrir a servicios como nuestra Asesoría para
Profesionales que Buscan Empleo, para que obtengas el empleo que deseas en
menos tiempo y de una manera más sencilla.